“¿Qué vas a hacer cuando seas grande?” La respuesta me empezó a inquietar mucho desde pequeño... aparte de “papá” pues no fui de una sola respuesta. Una vez, después de escuchar la parábola de los talentos y las recompensas en misa, recuerdo al padre diciendo que el fracaso solo podía atribuirse a flojera u odio al amo.La primera vez que pensé que había encontrado dónde usar mis talentos fue en Arquitectura... mientras estaba Teatro, mientras hacía mi música... y de todas en algún momento me cansé y ”las dejé botadas”.
Trabajé en los Call Centers mientras “encontraba eso que quiero ser”, busque ayuda vocacional, y a pesar de todos mis esfuerzos no sabía que hacer con mis talentos... es más cuáles son mi putos talentos? 😱 soy un nene que no puede sabe qué va a ser cuando alguien apriete el botón ...
Pero hoy aprendí que resulta que puedo ahuevarme y empezar otra cosa sin que eso sea malo. Y ¿Por qué darse cuenta de esto es importante para mí motivación? Porque me ayuda a ver que no es conformismo, falta de disciplina o miedo a seguir intentando, no es "rendirse”.
Si uno le cambia el enfoque, en esta búsqueda de respuesta he aprendido a ser altamente adaptable, con capacidad de sintetizar ideas y de aprendizaje rápido. Esos son mis talentos.
Este punto de vista viene en un TedTalk que se llama “Why some of us do not have a true calling”. Y también habla que en un buen equipo tienen que haber de dos tipos de personas. Por un lado el que ha encontrado su especialidad y tiene un conocimiento profundo: el especialista. Y por el otro el que puede ayudar a unir varias áreas: los multipotenciales.
Curiosamente es la razón por la que yo soy tan bueno en lo que hago es porque comprendo tanto el lenguaje de los "hombres de negocios" y el de "los tecnólogos", por lo que puedo establecer un puente. Además puedo hacerlo que se vea bien Gracias a mis conocimientos en diseño. Tenía una noción de esto pero hasta ahora tengo claridad de que es gracias a una característica mía, no lo que yo habría aprendido como un defecto.
Es más, volví a leer la parábola y cobró otro sentido.
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